El valor del suelo cultivable en Andalucía ha seguido aumentando. La Encuesta sobre Precios de la Tierra de Cultivo, publicada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, indica que en 2024 el precio promedio por hectárea fue de 17.064 euros en esta comunidad, reflejando un incremento del 3,27% en comparación con el año anterior. Este aumento es parte de una tendencia que se mantiene en los últimos años. Los cultivos bajo plástico en Andalucía son los más costosos de España, con más de 46.500 hectáreas por las que se paga, en promedio, 253.457 euros por hectárea. La demanda sigue existiendo dado que los precios aumentaron un 4,7% en un año.
En el contexto nacional, el precio promedio fue de 10.248 euros por hectárea, lo que implica un incremento del 2,8% anual y un aumento acumulado del 13,8% desde 2020. Andalucía mantiene precios intermedios, por debajo de los de Canarias (148.415 €/ha, atribuidos al alto valor de los suelos de plataneras) o Murcia (33.180 €/ha), pero superiores a regiones como Castilla y León (5.115 €/ha) o Aragón (5.175 €/ha), donde predominan los cultivos de cereal de secano.
En términos de tipos de cultivo, los precios que más se incrementaron a nivel nacional en 2024 fueron los frutos secos de secano, con un aumento del 6,7% alcanzando 7.261 euros por hectárea. Les siguen los cultivos de arroz, con un repunte del 5,1%, así como los cultivos tropicales, subtropicales y bajo plástico, todos con incrementos del 4,7%. El viñedo de regadío experimentó la mayor disminución, con una caída del -5,7%, seguido por los cultivos de huerta, que bajaron un -1,9%.
Los datos de 2024 se basan en 70.727 registros de transacciones de compraventa. Durante el período 2022-2024, se contabilizaron 218.745 operaciones, con información procedente del Catastro y notificaciones de notarios y fedatarios públicos, confiriendo a los datos un alto grado de fiabilidad estadística.
El aumento en el costo de la tierra en Andalucía se alinea con otros indicadores del sector primario que muestran una presión creciente sobre los costes de producción y la competitividad del suelo agrícola, en particular en áreas con alta demanda como Almería, Málaga o Huelva.
El crecimiento de cultivos como los tropicales en la costa andaluza, las expectativas positivas en el sector del olivar y la reevaluación de tierras con potencial de riego en zonas tradicionalmente secas están impulsando el alza de precios. Además, el interés de inversores privados y fondos en activos agrícolas está influyendo en este mercado.
Fuente: eleconomista.es