En la provincia argentina de Mendoza, la hidroponía se posiciona como una solución agrícola eficiente e innovadora frente a los desafíos de la escasez hídrica. Este método de cultivo sin suelo permite un uso eficiente del agua, aprovechando hasta un 70% menos de éste comparado con métodos tradicionales. Juan Carlos Casciani es un pionero en este ámbito, destacando la importancia de esta técnica en la producción agrícola moderna. Casciani explica que "un cultivo hidropónico es cuando las plantas se cultivan en agua, dándoles los nutrientes necesarios para que cumplan su ciclo".
La expansión de esta técnica en Mendoza ha permitido a los productores maximizar el uso del espacio, utilizando módulos verticales que aumentan la capacidad de cultivo en áreas reducidas. Este enfoque ha sido especialmente útil en zonas áridas, donde el espacio para la agricultura es limitado. Estos sistemas han minimizado la necesidad de pesticidas, al reducirse significativamente la incidencia de plagas en ambientes acuosos.
Desde 2019, Casciani colabora con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) en un módulo experimental dedicado a perfeccionar las prácticas hidropónicas. Se ha demostrado que el empleo de tubos de PVC de mayor diámetro mejora el desarrollo de las raíces y sustenta el cultivo de hortalizas voluminosas como el tomate y el pimiento. Además, este trabajo se ha extendido a la comunidad educativa, facilitando módulos a escuelas para capacitar jóvenes en estas técnicas agrícolas modernas.
Por otro lado, el forraje verde hidropónico (FVH) ha emergido como una opción viable para la producción ganadera en la región. Con antecedentes que se remontan al siglo XVII en Europa, el FVH permite cultivar sin suelo, optimizando el agua y el espacio. Según el Licenciado José Reta, esta técnica produce forraje de alta calidad nutricional, utilizando una fracción del agua requerida por métodos convencionales. Los agricultores han observado mejoras en la salud y la productividad de sus animales al integrar FVH en su alimentación.
A pesar de sus ventajas, la adopción del FVH enfrenta obstáculos en Argentina. "Argentina es uno de los países más atrasados en el tema del forraje verde hidropónico por ignorancia y desconocimiento", afirma Reta. Sin embargo, el interés por estas prácticas está aumentando y proyectos apoyados por profesionales están facilitando su implementación, promoviendo una producción más sustentable y eficiente.
Con la integración de la hidroponía, Mendoza se perfila como un ejemplo de cómo la innovación puede transformar los desafíos agrícolas en oportunidades de crecimiento sostenible.
Fuente: losandes.com.ar