En la Estación Espacial Internacional, los astronautas cultivan lechugas con agua reciclada e iluminan las plantas con luces LED rosadas, representando un futuro autosuficiente. Sin embargo, los datos muestran otra realidad.
Un estudio publicado en Nature, a partir de datos abiertos de la NASA, indica que los cultivos espaciales están perdiendo nutrientes y el cuerpo humano en microgravedad se vuelve más débil. Las lechugas cultivadas en el espacio contienen entre un 29% y un 31% menos de calcio y alrededor de un 25% menos de magnesio que las cultivadas en la Tierra. Esto se suma a variaciones en los niveles de hierro y potasio.
Las plantas cultivadas parecen saludables, pero carecen de valor nutricional. "Una ensalada espacial puede verse perfecta en las fotos, pero no fortalece los huesos", advierten los autores. La falta de calcio y hierro contribuye a la debilidad ósea y a problemas como la anemia y la fatiga en los astronautas.
La microgravedad afecta cómo las plantas absorben nutrientes, distribuyen agua y manejan el estrés oxidativo. Algunos antioxidantes se reducen, dejando a las plantas y a los consumidores con menos defensa contra la radiación. Las plantas en órbita producen menos moléculas protectoras y más compuestos de estrés, afectando sabor y capacidad de nutrición.
Junto al cambio de las plantas, los astronautas también experimentan alteraciones genéticas que afectan el metabolismo del calcio y la densidad ósea, según estudios de la NASA y la JAXA. Se observan signos de leaky gut o intestino permeable, donde se absorben peor los nutrientes y se incrementa la inflamación.
El estudio utiliza décadas de registros de astronautas y experimentos en órbita. Se combinaron datos de los repositorios OSD y SOMA de la NASA para analizar cultivos espaciales y biomarcadores humanos. Buscan entender la interacción entre la comida espacial y el cuerpo humano en microgravedad.
Para mejorar esta situación, científicos aplican bioingeniería y biofortificación en plantas para aumentar calcio, magnesio y hierro. También se analizan cultivos ricos en flavonoides que podrían proteger y fortalecer al cuerpo humano.
Extrayendo lecciones para Marte: mejorar la nutrición hoy en órbita preparará el camino para misiones largas como las del Planeta Rojo, donde es crucial cada nutriente.
Fuente: xataka.com