Surinam fue colonia holandesa desde 1667 hasta 1954, luego pasó a ser un país autónomo dentro del Reino de los Países Bajos y, finalmente, alcanzó su independencia plena en 1975. Desde entonces, los vínculos entre ambas naciones prácticamente se han disuelto. "Cuando Holanda se retiró tras la época colonial, no quedó ni un gramo de conocimiento compartido", lamenta Rob Baan, CEO de Koppert Cress y presidente de la fundación d'ONS. "Fue como apagar la luz y dejar a todos a ciegas. El potencial agrícola de Surinam es enorme, pero nadie ha querido asumir el reto. Nosotros venimos a cambiar eso".
© St DonsIntercambio de conocimientos.
A principios de los 2000, el panorama en Surinam comenzó a preocupar: el uso desmedido de mercurio en la minería de oro, la deforestación sin freno y los primeros efectos visibles del cambio climático —con temporadas cada vez más cálidas y húmedas— fueron señales claras de alarma. En respuesta, un grupo de holandeses —varios con raíces surinamesas— fundó la "Fundación para el Desarrollo Sostenible Países Bajos–Surinam". Ya su nombre dejaba claro el objetivo: construir un desarrollo sostenible mediante una alianza entre iguales.
© St DonsInvernadero tradicional.
De la alimentación saludable a la salud pública
En 2007, la fundación elaboró un informe que destacó cinco sectores claves para el desarrollo sostenible: agricultura, silvicultura, turismo, agua y energía. El gobierno surinamés respaldó la propuesta. Cuando Baan asumió la presidencia en 2019, redefinió la misión con un enfoque claro: nutrición y salud pública.
"En Voeding Leeft —una organización en la que participé— descubrimos que la comunidad surinamesa en los Países Bajos sufre niveles alarmantes de diabetes tipo 2, no hereditaria sino causada por la dieta. Entonces pensé: si allá es grave, en Surinam debe ser aún peor. Y no me equivoqué: es el país con mayor incidencia de diabetes tipo 2 en toda Sudamérica. El consumo de frutas y hortalizas es muy bajo, los productos locales son carísimos y lo importado, costoso y a veces de calidad mediocre", señala Baan.
© St DonsSurinam tiene una alta carga de enfermedades en la horticultura.
Colaboración en condiciones de igualdad
d'ONS no pretende ser una ONG tradicional. "La iniciativa debe nacer en Surinam", recalca Hendrik Comvalius, director de la fundación. "No queremos exportar soluciones desde Europa, sino construirlas juntos, hombro a hombro". Baan añade: "En Surinam pesan el orgullo y las heridas históricas. En Países Bajos, sospecho que simplemente no hay interés. Culturalmente seguimos unidos —todo holandés conoce a un surinamés—, pero políticamente los lazos están rotos".
Educación: la semilla del cambio
La transferencia de conocimientos es uno de los pilares del trabajo de d'ONS. "Nos dimos cuenta muy pronto de que el cambio real viene de la juventud", afirma Comvalius. Así nació un programa de intercambio entre centros educativos de ambos países. Varios estudiantes surinameses han cursado horticultura en el centro educativo holandés Aeres Hogeschool. El primero ya se graduó y trabaja para el Ministerio de Agricultura y el BID.
Además, cada año, unos 30 estudiantes surinameses realizan intercambios con el Lentiz MBO, priorizando jóvenes provenientes de familias agrícolas. "Queremos que vuelvan con conocimientos prácticos y una red de contactos. Que sepan a quién llamar cuando empiecen a producir hortalizas", dice Baan.
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Stichting d'Ons patrocina paneles solares.
Emprendimiento joven en el agro
d'ONS también apuesta por el emprendimiento rural. Durante la Semana de la Agricultura en Surinam, organizan encuentros donde jóvenes —incluso desde los 14 años— elaboran planes de negocio para sus propios emprendimientos agrícolas. En 2023, colaboraron con empresas obtentoras como Enza, Bejo, East-West Seeds y Rijk Zwaan para desarrollar una guía de semillas adaptada al país.
Un invernadero convertido en aula viva
Un caso emblemático es el invernadero de cristal instalado en la localidad de Lelydorp, construido originalmente para la feria Floriade. En 2023 fue donado al hogar infantil Mariahoeve con apoyo de Koppert Cress. Hoy funciona como centro educativo donde niños, jóvenes y agricultores locales aprenden horticultura moderna. d'ONS financia la gestión y capacitación docente durante los dos primeros años. Luego, la institución asumirá el liderazgo.
"Con las lluvias intensas de Surinam, es imposible desarrollar plántulas sanas sin protección", explica Baan, defensor del uso de invernaderos reciclados de Países Bajos. "Comenzar con plantones libres de virus es medio camino ganado".
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Hendrik Comvalius, director de Stichting d'ONS.
Tierras fértiles olvidadas y agua dulce en abundancia
Baan impulsa además la recuperación de antiguas plantaciones ribereñas, hoy cubiertas por la selva. "Ahí hay un potencial inmenso, pero reactivarlas requiere inversiones considerables: desbrozar, reabrir canales, acondicionar suelos". No obstante, ve oportunidades, sobre todo en cultivos intensivos en agua como el aguacate. "Aquí, el agua dulce abunda tanto que se desperdicia".
Mercado regional
Con apenas 600 mil habitantes, el mercado interno de Surinam es limitado. Pero los vecinos —Guyana Francesa y Guyana Británica— representan oportunidades. "Crecen económicamente, tienen petróleo y gas, y necesitan alimentos frescos. ¿Seguirán importando de EE.UU. o creamos una cadena sostenible en la región?", se pregunta Baan.
Exportar a Europa es, por ahora, inalcanzable para muchos productores: las certificaciones como GlobalG.A.P. son costosas y la logística aún no acompaña. "Enfocarse en el Caribe es más viable por ahora", añade Comvalius. "Allí nuestras hortalizas son muy apreciadas".
Un futuro verde en construcción
El mensaje de d'ONS es contundente: la juventud surinamesa no debe depender solo del oro, el gas o el petróleo. "La horticultura ofrece un potencial tremendo", afirma Comvalius. "Pero hay que invertir en conocimiento, tecnología e infraestructura". Los Países Bajos tienen la experiencia. Surinam, la tierra fértil y el agua. Uniendo fuerzas, paso a paso, d'ONS está sembrando las bases de un Surinam más sostenible, más equitativo y con futuro.
Para más información:
St. d'ONS
Lambertus Hortensiuslaan 66
1412 GX Naarden (Países Bajos)
Tel.: +31 (0)35 695 3405
Hendrik Comvalius (director)
[email protected]
Rob Baan (presidente)
[email protected]
www.stdons.nl
