La campaña española de hortalizas de fruto está ya muy avanzada. "En el país del tomate, se nota que el clima cálido de las últimas semanas ha estado teniendo un impacto favorable en las producciones. En cambio, la oferta de pimientos parece haberse ralentizado un poco, en parte debido a la presencia del Trips parvispinus. Esto está teniendo ya un gran impacto en el mercado y creo que se notará aún más en las semanas en las que haya escasez", afirma Luis Ramos, de la firma holandesa MG Fruit, con sede en Ridderkerk.
"Desde España están llegando ya incluso cantidades decentes de berenjenas y calabacines. Sin embargo, parece que los productores españoles de calabacín están optando por parar antes y pasarse a otros cultivos. Por otro lado, se espera que la producción española de berenjena se mantenga bastante estable. En general, los precios españoles de las hortalizas de fruto no están siendo nada del otro mundo, pero eso es algo que pasa siempre cuando se produce solapamiento con la temporada holandesa. Esa influencia se notará durante una o dos semanas más", pronostica Luis. El único producto que no registra precios bajos son los pimientos españoles. "Es uno de los pocos cuyos precios aún se mantienen altos", asegura.
"Por otro lado, en los últimos años, los pepinos mini se han estado consolidando como un producto cada vez más importante y han dejado ya de ser un producto de nicho. Lo mismo ocurre con los tomates cherry, por ejemplo, que se han convertido en un producto mucho más básico". Según Luis, el crecimiento de la producción ecológica de hortalizas de fruto se ha ralentizado bastante en España tras años de crecimiento. "Creo que esto es bueno, ya que garantiza un mejor equilibrio entre la oferta y la demanda".
Una tendencia más general, según Luis, es que las fusiones y colaboraciones están definiendo cada vez más el panorama del sector hortofrutícola español. "Las empresas están uniendo sus fuerzas para operar juntas y ahorrar costes. Del mismo modo, en España, cada vez hay más sociedades de inversión creando grupos de empresas más grandes con una gama de productos más amplia". Los invernaderos de cristal de alta tecnología no son una opción viable para muchos productores en el "mar de plástico" de Almería, según Luis. "Cuando hace calor, también hay que refrigerarlos y a los españoles no les gusta gastarse el dinero en invernaderos caros".
Cultivos tropicales
"Otra tendencia notable es el cultivo de productos cada vez más exóticos, como la pitahaya o el maracuyá, en regiones productoras del sur de España. Con temperaturas más altas, cultivar estos productos se está convirtiendo en una opción más". Aunque MG Fruit no tiene la ambición de convertirse en un actor importante con estos cultivos, Luis cree que generarán oportunidades en el mercado. "Si tu única alternativa es importar estos productos de Sudamérica o Asia, entonces tener a un proveedor más cerca puede resultar interesante. El transporte desde España sigue siendo factible, aunque la escasez de personal entre los transportistas españoles también está haciendo algo de mella".
"Incluso para productos españoles de cultivo al aire libre, como la lechuga iceberg y el brócoli, los precios holandeses siguen influyendo bastante en lo que se paga en España. Ya lo vimos el año pasado, cuando hubo bastante más producto disponible que demanda. Sin embargo, la situación general del mercado depende mucho de las condiciones meteorológicas en España. Si llueve en las principales zonas de producción durante dos días o hace mucho frío o calor, lo notamos de inmediato en términos de disponibilidad en Europa".
La temporada citrícola española también ha comenzado ya. "La gente en España está muy pendiente del calor extremo en Marruecos, que podría tener un gran impacto en la producción global y en los precios en España. Además, estamos viendo una menor producción de limones en España. Puede que los precios estén en un nivel más alto, pero la demanda tampoco es muy notable".
Para más información:
Luis Ramos
MG Fruit
Tel.: +31 (0) 180 745 477
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