El invierno representa un desafío para los invernaderos almerienses con la llegada del frío nocturno y el aumento del rocío. Estas condiciones propician la proliferación de enfermedades fúngicas, lo que genera preocupación entre los productores hortícolas de la región. Un estudio de la Universidad de Almería destaca cómo los cambios de temperatura nocturnos en estructuras mediterráneas incrementan la condensación interna y elevan el riesgo de patógenos.
En cultivos de pepino y tomate, el mildiu es uno de los problemas principales, como señala Carolina Rodríguez de SIPCAM Iberia. Este patógeno genera amarilleo de las hojas y afecta el rendimiento del cultivo. Ante esta situación, los agricultores recurren a medidas culturales tradicionales como el doble techo, aunque estas no son suficientes frente a alta presión del patógeno.
© Andrii Yalanskyi | Dreamstime
Para mitigar el impacto del mildiu, SIPCAM Iberia sugiere el uso del fungicida Xanilo 45 WG, que ofrece acción preventiva y curativa y es compatible con los programas integrados de manejo. Su compatibilidad con otros fitosanitarios lo hace un elemento estratégico en el control del patógeno.
La ceniza es otro patógeno que emerge en condiciones de alta humedad y ventilación nocturna insuficiente. Este hongo limita la fotosíntesis y el desarrollo de la planta, como explicó Rodríguez. SIPCAM Iberia recomienda el fungicida Araw, que es ecológico y se libera en presencia de humedad, actuando como sinergista con otras soluciones.
Además de la protección fúngica, el invierno ofrece una oportunidad para mejorar la calidad del fruto. Daniel Salgado de SIPCAM Iberia destaca productos como Blackjak para el enraizamiento, Liqui-K Express para el engorde del fruto y Record para mejorar la consistencia a través del calcio.
La combinación de medidas culturales, el uso adecuado de fungicidas y una estrategia nutricional enfocada se presenta como esencial ante los crecientes desafíos de humedad en invernaderos esta temporada. La compañía recomienda explorar soluciones integradas para mantener la producción y rentabilidad.
Fuente: www.fhalmeria.com