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​TropoTherm redefine el control climático de los invernaderos mediterráneos

"El retorno de la inversión en cubiertas termorreaccionales se obtiene en la primera campaña”

En el litoral mediterráneo, donde la radiación y la temperatura pueden oscilar drásticamente en cuestión de horas, los productores llevan décadas recurriendo al mismo recurso: el encalado. Un método eficaz en pleno verano, pero rígido, poco ajustado a las variaciones diarias y dependiente de servicios externos. Es precisamente en esa combinación de incertidumbre y coste operativo donde nace TropoTherm, una tecnología española que propone algo inédito: una cubierta que modula por sí misma la luz y la temperatura.

© TropoTherm

"Muchos agricultores blanquean tarde o demasiado pronto, y además quedan condicionados por la disponibilidad de las empresas que aplican el encalado", explican desde TropoTherm. El resultado se traduce en días con exceso de radiación y días con déficit, sobre todo en amaneceres, tardes y jornadas nubladas. "En general, las instalaciones ven afectados su rendimiento/productividad", y ese fue el detonante para desarrollar un film termorreaccional capaz de adaptarse en tiempo real.

La solución se basa en un aditivo termosensible "TropoSol™" incorporado durante la extrusión del plástico. Cuando aumenta la temperatura, el material reduce la transmisividad para limitar la radiación directa; cuando baja, vuelve a abrir el paso de luz. No hay motores, no hay automatismos eléctricos y no hay intervención humana; solo un comportamiento físico reversible, repetible y duradero.

© TropoTherm

Este cambio implica una reducción notable de las tareas vinculadas al sombreo. Los agricultores dejan de depender en una mayor parte del blanqueo, de sus costes y de la incertidumbre que comporta. "La gestión del sombreo es uno de los mayores condicionantes operativos en horticultura intensiva. Con TropoTherm, la necesidad de intervenciones manuales prácticamente desaparece", subrayan desde la empresa. El ahorro energético —especialmente en sistemas donde la ventilación y la refrigeración trabajaban al límite en los días de mayor carga térmica— se suma como efecto colateral.

© TropoThermFilm con TropoSol: en la zona clara, se observa cómo la cubierta no ha reaccionado debido a la falta de luz; en el resto del plástico se aprecia la activación de la cubierta, que se torna má opaca

"Los ensayos muestran incrementos de productividad en torno al 10% frente a cubiertas convencionales"
© TropoThermAunque la radiación difusa beneficia a múltiples cultivos, TropoTherm ha iniciado su validación con dos especies estratégicas del arco Mediterráneo: el tomate y el calabacín. "En ambos casos, los ensayos muestran incrementos de productividad en torno al 10% frente a cubiertas convencionales".

El efecto combina tres factores: menos estrés térmico, mayor difusión de la luz (superior al 90%) y un microclima más estable en las horas críticas. "El film permite que la planta siga trabajando con eficiencia sin sufrir los picos de calor que reducen el cuajado o frenan el crecimiento vegetativo".

Asimismo, el control térmico automático facilita no solo un mejor balance energético, sino también una reducción directa del estrés hídrico. TropoTherm ha registrado descensos de temperatura de hasta 2 °C, una cifra especialmente relevante en estructuras de baja altura o con ventilación restringida.

El impacto en el consumo de agua también es cuantificable: "durante un intervalo específico de la campaña se registró un ahorro hídrico del 10%, asociado a una mayor estabilidad de la humedad relativa y a una menor evaporación en las horas centrales del día. Además, no se aplicó encalado porque el film con TropoSol™ mantuvo unas condiciones de luminosidad y temperatura que hicieron innecesario reducir la radiación".

​El valor percibido, el gran desafío
Como con toda nueva tecnología, la aceptación del sector depende de su durabilidad, su retorno económico y su compatibilidad con las instalaciones. Y TropoTherm parece cumplir los tres requisitos:

  • Posee una durabilidad funcional asegurada de 3 años.
  • El retorno de la inversión se obtiene en la primera campaña, debido al incremento de rendimiento y a la eliminación del coste de blanqueo.
  • La fabricación de la cubierta se puede realizar en las líneas industriales estándar, sin necesidad de adaptar las extrusoras ni modificar estructuras en las fincas.

© TropoTherm

El principal obstáculo, reconocen, es cambiar la percepción de los agricultores sobre el valor de invertir en esta tecnología: "Debemos trasladar al productor que la inversión en la cubierta aporta beneficios que compensan sobradamente su coste. Por ello, TropoTherm está ampliando su validación en superficies comerciales de mayor escala, con datos comparativos que permitan acelerar la confianza del mercado".

Una cubierta capaz de reaccionar a la luz y la temperatura por sí sola puede representar un punto de inflexión en la industria. "Si las próximas campañas confirman las tendencias observadas, el Mediterráneo podría estar a las puertas de una nueva generación de invernaderos: más eficientes, más estables y menos dependientes de la gestión manual".

Para más información:
TropoTherm, S.L.
Almería, España
T. +34 950 208 756
[email protected]
www.tropotherm.es

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