Desde 2017, la superficie dedicada a cultivos bajo plástico en el entorno de Doñana revela un descenso continuo, pasando de casi 6.000 hectáreas en otoño de ese año a 4.298 en la actualidad. Así lo refleja el informe más reciente del Marco de Actuaciones para Doñana al mes de septiembre de 2025, según datos consultados por EFE.
Estos datos se obtienen de las campañas anuales de inspección de cultivos realizadas por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), empleando técnicas de teledetección espacial. La CHG examina imágenes durante el otoño, cuando se colocan los plásticos sobre los invernaderos, y en primavera, al finalizar la campaña. Esta información se cruza con datos cartográficos de derechos de riego, declaraciones de la Política Agraria Común y la ubicación de balsas.
Actualmente, 547 hectáreas, equivalentes al 13% de la superficie total bajo plástico, se encuentran fuera de la superficie agrícola regable (SAR), presumiéndose su ilegalidad, aunque algunas tienen derechos de agua reconocidos. Estas situaciones motivan las inspecciones de la CHG, que destacan una reducción del 20% en la superficie afectada para la campaña de primavera de 2025 respecto al año anterior.
Durante la campaña 2024-2025, CHG inspeccionó 327,17 hectáreas, lo que resultó en 37 denuncias por riego irregular en 314,6 hectáreas, con una captación aproximada de 1.646.421 m³. El informe también matiza que existen cultivos de arándanos dentro del perímetro del Plan Especial de Ordenación de las Zonas de Regadío al Norte de la Corona Forestal de Doñana (PEORCFD) que no utilizan plásticos y otros cultivos localizados fuera del ámbito territorial del PEORCFD, como en la zona de Los Hatos.
Desde 2023-2024, la CHG aplica una herramienta de teledetección basada en inteligencia artificial que proporciona datos en tiempo real sobre cultivos bajo plástico, actualizados cada cinco días. La legalidad de cada superficie se determina comparando las imágenes de satélite con la cartografía de la SAR, concesiones de agua y datos catastrales.
Estos resultados se publican para el público en el portal web https://teledeteccion.gie-us.es/cbp, con el fin de generar un efecto disuasorio que ayude a reducir la superficie de invernaderos implantados de manera irregular.
Fuente: lavanguardia.com
